Volver a la rutina después de largos periodos de vacaciones en los que no tenemos que ajustarnos a horarios, estamos relajados la mayor parte del día y no tenemos obligaciones, puede ser duro para muchos. Cuando retomamos las actividades habituales, la nostalgia de esos momentos de tranquilidad en los que podíamos disfrutar de una serie, un buen libro o salir caminar sin presiones puede generar lo que se conoce como síndrome postvacacional.
Parece un término poco habitual, pero para muchos puede representar un verdadero problema emocional y afectar su rendimiento. Aun así, siempre hay profesionales dispuestos a orientar a los pacientes que padecen de esto, ya sea en instituciones privadas o contando con la asistencia de recursos como el seguro médico Elma. Sea cual sea la alternativa que decidas tomar para combatir la depresión, te damos algunas recomendaciones.
Evoluciona lentamente
Como en cualquier actividad, pasar de 0 a 100 puede representar un duro impacto para cualquier persona, ya sea en un entrenamiento físico o simplemente en el trabajo. Si pasamos de un periodo de inactividad prolongado a lidiar con múltiples responsabilidades y elevadas cargas de estrés, los resultados pueden ser catastróficos.
Actividad física
Las vacaciones suelen ser un tiempo para desconectar de todo, simplemente para relajarnos y dedicarnos al descanso. En este tiempo también muchos se olvidan de dedicar tiempo al deporte, algo tan fundamental para la salud mental y física. Si quieres mejorar tu estado de ánimo y aumentar tu energía durante el día, salir a correr o practicar un poco de tu deporte favorito temprano por la mañana puede garantizar un día exitoso y productivo.
Planifica tu descanso
Si eres de los que, durante las vacaciones, se queda hasta altas horas de la noche despierto y tienes una anarquía con los horarios, es momento de empezar a planificar nuevamente tu rutina para dormir. El descanso es fundamental para poder rendir durante el día, y el síndrome postvacacional puede aparecer con mucha facilidad si careces de esas prolongadas horas de sueño ininterrumpido que ahora se han visto afectadas por los horarios laborales. ¡Es momento de dejar las series atrás e irte a dormir temprano!
Haz algo divertido
Aunque sea fácil decirlo, hacer tiempo para distraernos en medio de la jornada laboral durante la semana puede ser complicado. Ahorra todo el tiempo que puedas y empléalo en hacer algo que te genere una dosis de satisfacción, como tocar un instrumento, pintar, caminar por el parque, o incluso disfrutar de algún videojuego. Eso sí, en las dosis adecuadas, no más de un par de horas al día, ya que gastarás más energía de la que tienes.
Crea listas
Si tus tareas pendientes han comenzado a llover sin cesar, entonces una buena forma es establecer prioridades a través de listas y esquemas. Fija objetivos que puedas alcanzar con facilidad y no procrastines. Superar pruebas fáciles al principio despertará una sensación estimulante que te motivará a establecer retos más desafiantes y disfrutar de resultados positivos, siempre cuidando de tu salud.